No soy de las que santifican las fiestas pero comparto con mi familia. El domingo para mi, generalmente, es un día para compartir con mi madre y mi tía a la hora del café, leer el periódico y contarnos acontecimientos que me pierdo por estar toda la semana trabajando... Es un día tranquilo en donde buscar que hacer es lo que más ocupa mi tiempo...

Tomo el mando de la cocina, mi madre no es muy habilidosa en la cocina, así que el domingo es el día ideal para  apoderarme de la cocina y hacer a nuestros paladares salir de la rutina gastronómica a la que mi madre nos tiene acostumbrado. No soy Chef pero la no se me va mal, tengo mala memoria así que busco recetas fáciles que se hagan con lo que hay en casa y listo, me pongo manos a la obra, y eso también da pié a compartir en familia; las labores semanales no nos permiten compartir una comida los tres juntos, por lo que es grato que un domingo que cocino ver a mi madre y a mi padre, junto a mi sentados en la mesa y comiendo algo diferente...

La tarde se la dedico a mi tía, he vivido junto a ella toda mi vida y su café para mi es una religión, de 3 a 4 de la tarde espero su llamada con ansias; claro, cuando estoy en casa a esa hora que generalmente son sábados y domingos, hablamos hasta por los codos, de todo cuanto ocurrió en la semana y en eso se nos pasa la tarde. Siempre le he dicho a mi tía que por culpa de ella y su café es que no me mudo de casa... =D

Al caer la tarde, y por una invasión de termita, decidí limpiar la alcoba y mover todo de sitio. Mi cuarto no es sólo el lugar donde duermo sino el sitio donde trabajo el arte, es además mi taller; como una especie de santuario; con varios de mis dibujos y pinturas colgadas en las paredes, micrófonos, recuerdos por todos lados, herramientas, pinturas, pinceles y mi mesa de trabajo... En mi cuarto no hay vestíbulo ni ropa de ningún tipo, sólo un confidente, el televisor que no veo, un radio que uso para proyectar el televisor que no veo, dos mesas de noche una para las pinturas y otra para el multifuncional, un aparador con bocetos e instrumentos de trabajo, un peluche de Garfield, la cama individual con una colcha de Garfiel, y muchas latas decorativas de galletas que uso para guardar mil cosas sin importancia ahora, libros por doquier los que he leído y que me faltan por leer, y obviamente mi inseparable ordenador... ah! claro, en algún lugar esta un cel que uso poco, porque odio hablar por teléfono...

Es una enorme caja blanca de 5 x 5 mtrs. que lo único que le hace falta dentro es mi perra Pastror Alemán llamada Drika, una mousepen y una cámara fotográfica... de resto este es el mejor lugar para mi, sin ruido, alejado del mundo, donde nadie entra y donde la privacidad es la reina...


JHANOAYRA BB 2011
A VECES, SÓLO A VECES, LO COTIDIANO ES LO MÁS PARECIDO A LA PAZ...